Tras realizar un sobrevuelo por los municipios de Bolpebra y Cobija, el ministro de Defensa, Jorge Ledezma, y el gobernador de Pando, Edgar Polanco, declararon que el incremento promedio del caudal del río Acre se redujo de 17 a 7 centímetros, por lo que estiman que el nivel del agua empezará a regresar a su nivel normal en las próximas horas.
“El sábado el crecimiento promedio del río era de 17 centímetros, este domingo de 7, el nivel de las aguas tiende a bajar. Hicimos un sobrevuelo y se constato que en Bolpebra, 100 kilómetros al norte y río arriba, bajó el nivel del agua en 2,45 metros”, dijo Ledezma en conferencia de prensa.
El ministro dijo que existen 267 familias damnificadas, 1.099 personas en total; no es un dato final.
“4,5 toneladas de ayuda llegaron a Pando. Ración seca, leche, sardinas y picadillos. También 150 colchones, 380 pares de botas de goma, 360 ponchos impermeables y 100 mosquiteros. También entregaremos implementos de limpieza personal”, indicó el ministro.
El gobernador de Pando, Edgar Polanco, dijo que se realizó un sobrevuelo a Bolpebra en la que se pudo constatar que el caudal del río Acre bajo de 13,20 a 10,78 centímetros y que bajaría más en las próximas 24 horas.
El alcalde de Cobija, Carmelo Vargas, agradeció al Gobierno por la ayuda y manifestó que la población pasa por un momento crítico. “Está volviendo la calma, pero ahora toca minimizar los problemas que están pasando los vecinos evacuados y atenderlos”, dijo.
Desbordo el Acre
Cientos de personas se vieron obligadas a abandonar sus casas el sábado en la zona norte de Cobija ante el desborde del río Acre. Los damnificados se refugiaron en ocho coliseos municipales. El suministro de energía fue cortado en la madrugada de este domingo en los cinco barrios afectados para evitar mayores desastres.
El director de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Johnny Velarde, explicó que existen puestos médicos en los 8 albergues habilitados y realizan inspecciones permanentes para verificar si existen las condiciones necesarias para habitar los recintos.
“Tenemos puestos médicos en los 8 albergues donde se realizan evaluaciones. Los albergues tienen luz, el servicio de agua falta en un 40%, los baños están a punto de habilitarse al 100%”, dijo Velarde.
El epidemiólogo del Sedes, Rodolfo Villarroel, explicó que se coordina con la Gobernación y la Alcaldía para solicitar medicamentos al Gobierno, a fin de atender enfermedades respiratorias y gastrointestinales.
“Hemos atendido enfermedades diarreicas, infecciones respiratorias y gastrointestinales. Tenemos seis embarazadas en los albergues, que reciben un trato especial. La alimentación lo da el municipio”, explicó.
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